7 razones para tener una Sesión de Novia
Hola chicas,
¡Se aproxima una época lindísima y perfecta para realizar sus sesiones de fotos! Por eso hoy les quiero hablar de la importancia de tener una Sesión de Novia; de verdad que uno no se da cuenta hasta que la tiene de lo esencial que es. Aquí algunas razones:
1. Prueba de Maquillaje: En mi caso esto fue una de las razones de mayor peso. Este día pueden ver lo que se les ve bien, lo que no, si quieren más fuerte la sombra, si quieren más delgado el delineador, etc. Yo durante meses me estudié los diferentes estilos de maquillaje, los tonos que mejor iban con mi piel, los labiales, y todo lo relacionado para lograr el "maquillaje perfecto". Y al final escogí un look muy "natural". ¡Quería verme muy femenina y fresca!
*Digo "natural" jaja porque en realidad de natural no tenía nada; debajo de ese maquillaje habían capas de base, polvos, iluminadores, contouring, sombras, pestañas, etc etc.. ;)
2. Prueba de Peinado: A mi esto sinceramente no me preocupaba mucho al principio, porque lo que quería era un moño sencillo y terminó resultando una tragedia. El primer moño que me hicieron no me gustó, lo sentí como muy grande y muy bajo. Y para peores; ¡durante la sesión de fotos cuando me quité el velo se desarmó! Por dicha mi abuelita, que es toda una gata peinando me hizo un moño lindísimo y pudimos terminar la sesión. Gracias a esto nos dimos cuenta que el moño había que reforzarlo y que el velo debía ir en otra posición. *Cuando me quité el velo le agregué a mi peinado un accesorio súper femenino y delicado con pedrería que conseguí en la tienda Dieciséis, en Avenida Escazú.
3. Prueban el Vestido y el Velo: Aunque no lo crean hay que "practicar" como manejar ese vestido. ¡Uno no está acostumbrado al peso, a la tela, en mi caso a la cantidad de botones que había que cerrar, el largo del velo, como se me acolochaba el velo cuando caminada, de todo! Y durante la sesión pude probar todo esto hasta que me logré familiarizar con el vestido y me sentía super cómoda. También nos sirvió a mi mamá y a mí a poder calcular cuánto rato durábamos poniendo el vestido para el día de la boda no tener que andar corriendo.
*Tip: si escogen un vestido con muchos botoncitos como el mío, les súper recomiendo tener a mano una de estas agujas de crochet, que les van a facilitar la VIDA y tiempo a la hora de cerrarlo.
4. Estiran los tacones: Este día también tienen la oportunidad de estrenar y aflojar los tacones, lo cual es buenísimo para que no se lastimen el día de la boda. En mi caso yo escogí unos tacones sencillos y cómodos, no muy altos porque sabía que nos los iba a aguantar, aparte de que me daba terror tropezarme entre tanta tela y los nervios entrando a la iglesia.
5. Prueba de bouquet: Esto es súper importante, el bouquet es un accesorio lindísimo que las va a acompañar durante el gran día, así que es muy importante que hagan una prueba para ver si les gusta el tono de las flores, el tamaño, si no está muy pesado, etc. También es bueno que practiquen como agarrarlo de una manera adecuada, con una buena postura. Para mi el bouquet juega un papel súper importante durante la sesión ya que aporta mucha feminidad y desde mi punto de vista hace que toda la sesión se vea más real, como si fuera el gran día.
6. Descargan sus sentimientos: Para mí ese día fue una avalancha de sentimientos. Estaba muy emocionada por la sesión, me estresé toda porque se me desarmó el moño, tenía calor, me puse a llorar cuando me vi toda vestida porque me di cuenta que ahora si "ya no faltaba nada para la boda", ¡y muchas otras cosas más! Ustedes no tienen idea la cantidad de sentimientos y pensamientos que tiene uno en el momento que se pone el vestido y se ve al espejo. Es lindísimo, pero también muy impactante y por eso es bueno tener un pequeño "sneak peek" de esos sentimientos antes de la boda para poder manejarlos mejor durante el gran día.
7. Tienen tiempo para acomodarse, posar y tener fotos lindísimas para siempre: ¡Mi sesión de novia duró 2-3hrs! La hicimos con calma, yo llore, me reí, volví a llorar, jaja y fue lindísimo; la disfruté al máximo. El día de la boda es tanta la emoción y el estrés y todo lo que uno siente antes de la ceremonia que yo ni tiempo tuve de posar, porque apenas me terminaron de maquillar me vestí y ya era hora de irme a la iglesia, entonces casi no me tome fotos ya lista hasta que llegué a la iglesia. Aparte de que yo el día de mi boda lo que quería era disfrutar, disfrutar con Roberto y con mis familiares y amigos, lo último que quería era estarme preocupando por si estaba saliendo bien o no en las fotos. Y por eso me encantó haber tenido el tiempo, la tranquilidad y la paciencia de haberme tomado estas fotos antes de la boda.
¡Si todavía lo están dudando, ya no lo duden más! Yo sé que es plata, y sé que cuando uno esta planeando la boda el presupuesto es todo un tema (créanme ya estuve ahí) pero de verdad que les puedo asegurar que estas fotos lo valen CADA centavo.
Para esta sesión tuve a la fotógrafa más linda y paciente: Viviana Vieto.
Besos,
TBH.